miércoles, 29 de abril de 2009

Dios y el teléfono descompuesto

Es trillado hablar de Dios; del personal, masculino, bueno con los buenos y malo con los malos; creador de lo que vemos y no vemos. Invisible, lejano... sospechosamente misterioso.
Desde niños los adultos nos obligan a creer en Dios. Y así crecimos, "temerosos de Dios" o "felices, amorosos y tolerantes creyentes".

Quizá estemos arrastrando el atavismo más antiguo del planeta. La repetición es la madre de la inconciencia.
¿Se acuerdan del juego infantil "el teléfono descompuesto"? Era algo así como pasarse un mensaje de boca en boca, resultando al final otro mensaje: se deformó el objetivo. Un teléfono descompuesto, eso es, muy descompuesto.
El fuego, el sol, las estrellas, cualquier incógnita, todo aquello, se fue "afinando" para crear un dios a imagen y semejanza del hombre: me das, te doy, me quieres, te quiero, me fallas, te fallo.
¿Cuál será, por cierto, la creencia del futuro, el dios del futuro lejano?...porque el teléfono sigue descompuesto, los cables son de carne y son de hueso...estoy en que en los milenios venideros, Dios será otra cosa, quizá una mariposa.

sábado, 25 de abril de 2009

Los siete pecados capitales

A ver
Son siete: Lujuria, Gula, Avaricia, Pereza, Ira, Envidia y Soberbia...

¿Quién está excento de todas, o incluso de alguna?

Creo que más que pecados, son rasgos naturales del ser humano. Unos más otros menos, pero son tan humanos como el comer, el dormir, el vivir.

lunes, 6 de abril de 2009

La semana santa

Confieso que no soy religioso, pero también confieso que me gusta el ambiente taciturno de la semana santa. Me gusta el misterio. Me gustan los misterios de las tradiciones milenarias. Pienso en cómo pudo haber sido el pasado que gestó, lentamente, el presente.
¿Qué pasaría realmente hace dos mil años? ¿hemos magnificado el pasado?
¿El hoy será magnificado y será el misterio del futuro?
El futuro y el pasado es producto de la mente: la conjetura y la memoria. El presente, por vano que sea, es lo real.