Pues nada, que me ando esforzando mentalmente para idear algún producto o servicio y... venderlo.
Hace un par de años, fabrique unas sillas de fierro sin investigar el mercado, y... aquí las tengo todavía: las uso yo. Las fabriqué porque mi emoción y lógica me decía que el esfuerzo por sí solo es suficiente para ser recompensado con algo a cambio: dinero, por ejemplo. Esa lección me enseño que no es necesario un gran esfuerzo, al menos en estos días; ni siquiera una buena idea por sí sola funciona. Creo que lo que vende es la marca. Claro, detrás de una marca están las cosas que le dio prestigio a esa marca: calidad, inovación, servicio, precio.
Pensando estas últimas semanas me llego a la mente la idea de la especialización; vender cosas absurdas. Esto debido a que vi en internet unas páginas de empresas norteamericanas que venden desde lentes para perro hasta huesos de la buena suerte, y cosas por el estilo. Solo que, me puse a pensar, ¿los mexicanos son así de exoticos compradores que los estadounidenses? Creo que no. Aquí las personas son más "conservadoras", "marquistas" y regateadoras.
¡Se aceptan ideas de donde sea, de quien sea y como sean!
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2 comentarios:
es dificil.. creo q de haber tenido una idea factible ya estaría intentando ponerla en practica
un comentario relacionado con eso.. ahora q fui al DF vi en el metro como suben y suben personas q venden cd's con musica mp3
llevan en una mochila unas bocinas y con un discman van poniendo todas las canciones
yo dije: q mala idea, nadie comprará en el metro un cd de boleros o de musica de los 70's
pero no.. me tocó ver como vendía varios
q dificil intentar predecir el comportamiento de los compradores
Si hombre, es difícil definir un destino comercial. Los compradores son volátiles. Es más, me atrevo a decir que los empresarios exitosos lo han sido a pesar suyo.
¿Karma? ¿suerte? ¿transas?
¿Quién puede saberlo?
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